Revisiones básicas en tu vehículo antes de un gran viaje en carretera

Siempre que hagas un viaje en coche debes acometer una serie de revisiones básicas del vehículo para asegurar una conducción segura. Para ello te aconsejamos llevar el coche a un taller mecánico y que los profesionales se encarguen de implementar las inspecciones correspondientes. No obstante, en este artículo te mostramos cuáles son los puntos importantes que debes tener controlados antes de rodar con el coche cientos y cientos de kilómetros.

Preparativos para un viaje en coche

Además de asegurarte de que en tus maletas no falten los artículos imprescindibles para tu estancia, te recomendamos que lleves a cabo unos adecuados preparativos para un viaje en coche relacionados con la mecánica y los documentos obligatorios. Así, evitarás sorpresas desagradables, como multas o averías. Por supuesto, no olvides tu carnet de conducir en casa para facilitar el trabajo de los agentes en el caso de que procedieran a pararte en un control de tráfico.

Lo más recomendable antes de hacer un viaje largo es acudir a un taller profesional. Los mecánicos revisarán el estado de tu vehículo y repararán lo necesario para emprender el viaje con total seguridad.

Uno de los aspectos que deberás revisar tú mismo es que la ITV está actualizada. Cerciórate de que el período de caducidad no coincide con las fechas en las que estarás de viaje, dado que circular con la ITV caducada conlleva una sanción económica.

Si te toca pasar la revisión durante tu viaje la solución más efectiva es adelantar la inspección para marcharte con la ITV al día. De este modo podrás estar tranquilo ante cualquier control rutinario de tráfico.

¿Sabías que la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) se instauró en octubre de 1981? Inicialmente solo fue obligatoria para los vehículos industriales y se generalizó para el resto en 1985.

¿Cómo revisar tu vehículo?

Antes de emprender el viaje, tú mismo podrás hacer algunas comprobaciones del estado de tu coche. Sin embargo, otras deberán ser abordadas en un taller profesional. Para saber cómo revisar tu vehículo, al menos en lo esencial, te animamos a seguir leyendo.

Aceite

Especialmente en los coches diésel con filtro antipartículas resulta indispensable que revises el nivel de aceite. Este tendrá que permanecer dentro de los márgenes estipulados. Deberás observarlo siempre en reposo y cuando haya transcurrido, como mínimo, media hora desde que apagaste el motor.

El aceite del coche es muy importante porque lubrica las partes móviles del vehículo, limpia, inhibe la corrosión y reduce la temperatura del motor alargando así la vida del mismo.

Limpia la varilla correspondiente con un trapo e introdúcela por el agujero adecuado. Una vez la saques podrás calcular el nivel de aceite. Si está bajo, deberás verter un poco hasta equilibrar el nivel.

De forma general, es recomendable que cambies el aceite del coche cada 15.000 o 20.000 kilómetros. Si tienes dudas, adelanta el servicio y solicita cita en tu taller para salir de viaje con el aceite ya cambiado.

La batería

Por desgracia, este elemento es uno de los que más problemas originan en los coches. Muchas veces es responsable de que veas coches en mitad de la carretera esperando al servicio técnico. ¡Imagínate estar en mitad de tu viaje y que no te arranque el coche!

¿Sabías que en los motores de gasolina el sonido de arranque puede ser un gran indicador del prematuro deterioro de la batería?

Si en las últimas semanas aprecias que a tu coche le cuesta arrancar por las mañanas, sé previsor y comprueba su nivel de carga en un taller especializado. Si es preciso, cambia la batería antes de marcharte.

Otros líquidos del coche

Aparte del aceite, también es conveniente que revises el nivel del anticongelante y el del aceite de la caja de cambios. En este último caso deberás hacerlo con el motor en marcha, y solo si tienes un coche automático. En cuanto al anticongelante, es más conveniente medirlo en frío.

Para comprobar el nivel del líquido anticongelante utiliza como referencia las dos marcas de máximo y mínimo que vienen en el exterior del depósito. Si el líquido se sitúa entre estos dos indicadores el nivel de anticongelante es el adecuado.

En esta misma línea, deberás comprobar el nivel del líquido de frenos para que esté siempre por encima del mínimo. Y, ya que estás, el del limpiaparabrisas.

Iluminación

Todas las luces de tu vehículo deben funcionar a la perfección. Ver y ser visto son dos aspectos prioritarios en la carretera. Tú mismo podrás comprobar si todo el alumbrado está en buenas condiciones. Para implementar un reglaje perfecto y evitar deslumbramientos, te aconsejamos que acudas a tu taller para que lo regulen debidamente. Si existe alguna luz fundida acude al taller para sustituirla, sobre todo, si esta es de xenón o LED.

Otro aspecto muy importante es la altura de las luces. La mayoría de los coches tienen un mando con cuatro niveles (del 0 al 3). Utiliza la posición 0 cuando sólo estén ocupados los asientos delanteros, la posición 1 cuando viajes con todas las plazas ocupadas, la posición 2 si además llevas carga en el maletero, y la posición 3 si solobcircula el conductor con el maletero lleno.

La presión de las ruedas

Los coches de diseños vanguardistas ya incorporan de serie un sensor de presión. No obstante, si el tuyo no dispone de esa prestación, deberás medir la presión como se viene haciendo desde siempre: con un medidor que encontrarás en gasolineras. Con esta calibración disminuirás el riesgo de accidente y rebajarás el consumo hasta en un 20 %.

Comprueba los niveles que marca el fabricante y ajusta tus neumáticos a ellos. Por lo general, los hallarás en una pegatina ubicada en la tapa del depósito de la gasolina o en el interior de la puerta del vehículo. Si tienes las ruedas para cambiar, no lo dejes para la vuelta: por seguridad, debes hacerlo previamente.

Para medir la presión de los neumáticos para el motor, activa el freno de mano, bájate del coche, quítale el tapón a la rueda y coloca la manguera de la máquina de aire sobre la misma. Si las cifras de la máquina están por debajo de la presión que recomienda el fabricante de tu coche introduce el aire necesario para alcanzarla.  

Como ves, las revisiones básicas del vehículo son fundamentales antes de salir de viaje. Esperamos que esto te sirva para aclarar dudas y conocer cómo llevarlas a cabo. ¡Comparte esta información en tus redes!